LA ACTUAL ECONOMIA ESTADOUNIDENSE.

De acuerdo a fuentes dignas de todo crédito, el mayor problema económico que enfrenta Estados Unidos es el mercado inmobiliario por una razón muy simple: hay muy pocos compradores.

Como es obvio, la falta de demanda causa que los precios de los bienes raíces se desplomen, y los pronósticos no son alentadores, pues los expertos dicen que los precios caerán aún más el presente año, de un 7 a un 10 por ciento. Y no se ve luz al final del túnel.

Dicen que la devastación en algunas regiones nunca se recuperará. Grandes áreas de Georgia, Arizona y Oregón han quedado progresivamente desiertas, ya que el índice de desempleo llegó a extremos tan elevados que nunca se recuperará.

Y los datos para el estado de la Florida no son del todo alentadores.
El total de casas desocupadas asciende al 21.3%.
El total de ejecuciones hipotecarias (foreclosures) 5.51%.
La disminución de permisos de construcción entre 2006-2010 se desplomó a -81.37%.

El índice de desempleo en la Florida llega al 12%. Es decir, que en la actualidad hay aproximadamente 1.1 millones de residentes que se encuentran sin trabajo.

Nuestro estado, sin ser el peor, está entre los cuatro más afectados de la nación en el aspecto económico.

Y pensar que hay personas que pretenden dar soluciones mágicas argumentando que para que se restablezca la economía, lo mejor es reactivar la construcción, ¿reactivar la construcción cuando hay millones de casas desocupadas? ¿construir más cuando hay mucho más oferta que demanda? ¿edificar viviendas para vendérselas a quién?
Si usted fuera un urbanizador y tuviera 100 casas desocupadas y deudas con los bancos, ¿la solución sería construir cien más? Esta solución no tiene ninguna lógica.

Yo tampoco tengo la solución mágica. Ni soy un alto funcionario del Gobierno, ni soy economista. Soy tan sólo un ciudadano pensionado que después de trabajar durante más de 40 años pagando mis impuestos correctamente, hoy se ve golpeado por los engaños de los poderosos que no se les dio la gana de autorizar un incremento justo para los jubilados, argumentando que el costo de la canasta familiar no subió en el 2010 y tampoco subirá en el 2011, ¡Qué magos! ¿Habrá algún ingenuo que les crea sus mentiras?

Hay algo innegable: El actual gobierno apoya a los ricos y se olvida de los pobres.

José M. Burgos S.