IMPUESTOS PARA TODOS:

Impuestos para todos

Estimado Sr. Director:

“Que los ricos paguen más”; “Pedir más sacrificios a la gente, mayormente a los estadounidenses más ricos”; “Mi plan es el mejor de todos…”. Estas frase y otras parecidas pidiendo ayuda, sacrificio, redistribución de riquezas, cambios, igualdad, campaña contra los ricos, no salieron del “VI Congreso del Partido Comunista de Cuba”. Son frases de nuestro presidente Barack Obama y están por todas partes. La gente te juzga primero por lo que dices, después por lo que haces y por último por los resultados. Pero si lo que dices y haces se parecen y los resultados son malos, entonces, “Ni hablar”.

¿Por qué se complica todo al hacer un plan para algo, para los impuestos, la salud, los seguros etc., para cualquier asunto que llega a las manos de quienes integran el gobierno? Hay muchas preguntas que todos sabemos cuáles son las respuestas, pero vamos a usar las mismas palabras de la agencia Standard & Poor’s, cuando calificó el panorama de la deuda de EEUU de negativo: La razón, “Duda de la capacidad de la clase política de EEUU, para ocuparse del déficit presupuestario de la nación”. El problema no es cumplir con nuestro deber de pagar impuestos, el problema son las excepciones que se hacen, para cumplir compromisos etc. Todos saben lo que hay que hacer, pero nadie quiere sacrificarse, como dice el refrán, “Nos negamos a cortar por lo sano”. Tiene que haber una medida igual para todos.

Todo lo que se hace, es para proteger a los patrocinadores de la clase política en el poder, y proteger al poder detrás del poder. Al final, todos los planes, programas e ideas, son basados en el sacrificio del pueblo y el contribuyente. Hay una clase que no se sacrifica y no arriesga sus beneficios y posiciones; Una clase política incapaz de enfrentarse con sensatez, valentía y sentido común al problema. No se trata de republicanos o demócratas, se trata de todos en general.

Lo que está pasando en la nación “George Washington” lo expreso con una claridad que asusta.

“El gobierno no es una razón, tampoco es elocuencia, es fuerza. Opera como el fuego; es un sirviente peligroso y un amo temible; en ningún momento se debe permitir que manos irresponsables lo controlen.” “George Washington”

¡Entendieron!, más claro ni el agua

José M. Izquierdo