Las armas fueron hechas para matar, y son usadas más por los malos, no por los más buenos.
Si se implantara un estricto control para frenar este infernal y lucrativo comercio, se salvarían muchas vidas de personas inocentes.
Es difícil entender por qué este país que condena la violencia, permite la venta de armas de fuego, las cuales se pueden adquirir muy fácilmente, y después protestan por la violencia que generan, no sólo en los demás países de nuestro hemisferio, también dentro del propio territorio estadounidense.
Los mejores clientes, no son precisamente, personas amantes de la paz, todo lo contrario, los mejores clientes son los que causan las matanzas.
A los asesinos en serie no les atemorizan las leyes e inclusive, muchos se suicidan después de matar hasta a sus propios padres. Para ellos no existen reglas ni estatutos, porque están llenos de odio y sus mentes enfermas les impide establecer la diferencia entre el bien y el mal.
Los países en los que más impera la violencia son los que más tienen armas de fuego.
Colombia, por ejemplo, ha sido azotada por la violencia durante mucho tiempo como también otros países de nuestro continente y del mundo.
En México no existiría tanta violencia si el porte de armas de fuego fuera prohibido. Y éstas no se fabrican dentro del país azteca, las compran en Estados Unidos.
Si a los terroristas de las FARC y a otros grupos que actúan al margen de la ley se les dificultara conseguirlas, no podrían causar tanto dolor. Estos asesinos son los mejores clientes y saben usarlas, porque tienen práctica en matar sin compasión.
No puedo imaginarme un país donde todos tengan que portar armas como si fuera un celular, para defenderse de los delincuentes. Si este fuera el caso, tendríamos que transitar con armas cargadas y listas para disparar, pues los malhechores no dan tiempo a que nos sentemos a cargarlas para poderles disparar.
Deberíamos eso sí, tener artefactos defensivos, como sprays o pistolas que paralizan, pero no que matan.
Las armas destruyen, no construyen y, por lo tanto, la paz no debe ser construida con base en la violencia.
José M. Burgos S.
jueves, 31 de enero de 2013
viernes, 25 de enero de 2013
Martin Luther King
Este nuevo período de la historia, un mundo turbulento, golpeado por el terrorismo internacional y de cambios dramáticos, debemos continuar con el sueño de líderes pacifistas como Martin Luther King y Mahatma Gandhi por la igualdad, hermandad, justicia, libertad y la paz mundial. Gandhi combatía a los británicos con su doctrina no violenta y King fue famoso y popular por su “resistencia pacífica” y por su lucha por los derechos civiles para todos, minorías, negros, hispanos, mujeres y hombres libres.
El doctor King fue activista del Movimiento por los Derechos Civiles en Estados Unidos y Premio Nobel de la Paz en 1964.
King tenía una personalidad carismática y arrolladora, organizó y llevó a cabo marchas por el derecho del voto, la no discriminación y otros derechos civiles básicos, logrando que fueran promulgados y hoy lo recordamos como uno de los mayores héroes de la historia de Estados Unidos y en la moderna historia de la no violencia.
“Tengo un sueño, soñar con la libertad, con la justicia y con la igualdad y ojalá ya no tuviera necesidad de soñarlas”.
Elsa I. Pardo
El doctor King fue activista del Movimiento por los Derechos Civiles en Estados Unidos y Premio Nobel de la Paz en 1964.
King tenía una personalidad carismática y arrolladora, organizó y llevó a cabo marchas por el derecho del voto, la no discriminación y otros derechos civiles básicos, logrando que fueran promulgados y hoy lo recordamos como uno de los mayores héroes de la historia de Estados Unidos y en la moderna historia de la no violencia.
“Tengo un sueño, soñar con la libertad, con la justicia y con la igualdad y ojalá ya no tuviera necesidad de soñarlas”.
Elsa I. Pardo
sábado, 19 de enero de 2013
Un estadio para Los Dolphins
Siguiendo los pasos de los Miami Marlins, a los cuales "Generosamente" los
políticos locales les regalaron un moderno estadio de béisbol, financiado
en gran parte con dinero público, bajo contratos desventajoso y bochornosos
para el gobierno de la ciudad de Miami y el Condado Miami Dade, los Dolphins
consideran también que tienen derecho a un pedazo del pastel y preparan un
plan: Quieren restaurar su estadio, usando igual que los Miami Marlins,
dinero de los contribuyentes.
La estrategia a seguir ya está elaborada e incluyen sugerencias concretas:
Un descuento adicional de los impuestos estatales recaudados por la venta de
bienes y servicios que genera el estadio y un aumento del 6 por ciento al
impuesto por alojamiento hotelero.
Los Dolphins, fieles a una estrategia que les ha costado mucho dinero a los
contribuyentes, aseguran que el dinero que se recaudará si se aprueban estas
sugerencias, no afecta los bolsillos de los contribuyentes del sur de la
Florida, y esto es algo totalmente Falso.
Los Dolphins y los Marlins, representan negocios millonarios, donde se pagan
salarios millonarios a sus jugadores, técnicos y ejecutivos, donde las
ganancias de sus accionistas o dueños son millonarias y además, no las
comparten con la sociedad que los apoya. Entonces, ¿Por qué los
contribuyentes deben financiar inversiones como esas?
El estadio para los Dolphins se va a remodelar y se va a hacer con dinero
público, dinero de los contribuyentes a pesar de cualquier opinión
contraria al respecto. Esto es negocio y hay mucho dinero en juego, es
negocio tanto para los Dolphins, como para los políticos. Cuando la
dirección del equipo de los Dolphins se atrevió a anunciar sus propósitos,
es porque ya el caldo está cocinado y solo falta preparar a la opinión
pública buscando su apoyo.
Se ha convertido en costumbre, algo que en esencia es un engaño consciente:
Decir que los fondos que provienen de otras instancias del gobierno como el
estado o el gobierno federal, no nos afecta, no es cierto. Todo el dinero del
gobierno a cualquier instancia, proviene de nuestros impuestos. Hacer creer a
los vecinos del sur de la Florida, que aumentar el impuesto hotelero a los
turistas que nos visitan, no nos afecta, no es cierto. El constante
encarecimiento del costo hotelero a los turistas que vienen a esta bonita
región, los aleja cada día más de venir a disfrutar sus vacaciones al sur
de la Florida, y eso afecta el turismo, del cual dependen cientos de miles de familias en esta región.
José M. Izquierdo
políticos locales les regalaron un moderno estadio de béisbol, financiado
en gran parte con dinero público, bajo contratos desventajoso y bochornosos
para el gobierno de la ciudad de Miami y el Condado Miami Dade, los Dolphins
consideran también que tienen derecho a un pedazo del pastel y preparan un
plan: Quieren restaurar su estadio, usando igual que los Miami Marlins,
dinero de los contribuyentes.
La estrategia a seguir ya está elaborada e incluyen sugerencias concretas:
Un descuento adicional de los impuestos estatales recaudados por la venta de
bienes y servicios que genera el estadio y un aumento del 6 por ciento al
impuesto por alojamiento hotelero.
Los Dolphins, fieles a una estrategia que les ha costado mucho dinero a los
contribuyentes, aseguran que el dinero que se recaudará si se aprueban estas
sugerencias, no afecta los bolsillos de los contribuyentes del sur de la
Florida, y esto es algo totalmente Falso.
Los Dolphins y los Marlins, representan negocios millonarios, donde se pagan
salarios millonarios a sus jugadores, técnicos y ejecutivos, donde las
ganancias de sus accionistas o dueños son millonarias y además, no las
comparten con la sociedad que los apoya. Entonces, ¿Por qué los
contribuyentes deben financiar inversiones como esas?
El estadio para los Dolphins se va a remodelar y se va a hacer con dinero
público, dinero de los contribuyentes a pesar de cualquier opinión
contraria al respecto. Esto es negocio y hay mucho dinero en juego, es
negocio tanto para los Dolphins, como para los políticos. Cuando la
dirección del equipo de los Dolphins se atrevió a anunciar sus propósitos,
es porque ya el caldo está cocinado y solo falta preparar a la opinión
pública buscando su apoyo.
Se ha convertido en costumbre, algo que en esencia es un engaño consciente:
Decir que los fondos que provienen de otras instancias del gobierno como el
estado o el gobierno federal, no nos afecta, no es cierto. Todo el dinero del
gobierno a cualquier instancia, proviene de nuestros impuestos. Hacer creer a
los vecinos del sur de la Florida, que aumentar el impuesto hotelero a los
turistas que nos visitan, no nos afecta, no es cierto. El constante
encarecimiento del costo hotelero a los turistas que vienen a esta bonita
región, los aleja cada día más de venir a disfrutar sus vacaciones al sur
de la Florida, y eso afecta el turismo, del cual dependen cientos de miles de familias en esta región.
José M. Izquierdo
martes, 8 de enero de 2013
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